Es una fotografía,
o una célula que usurpamos,
a esa clase de ameba traidora
que es el tiempo.
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No hace falta entender, hace falta aprender la asfixia como un lenguaje cotidiano.
Escribe: "El recuerdo es lo único que permanecerá por siempre indeleble".
Quien transita este libro ingresa al borde, a ese "agujero negro" del que nos habla.
La poesía como retrato de lo que no llega, pero es la acrobacia a la que recurre para salvaguardarse de tantas noches en las que "la contemplación de la belleza puede ser agotadora". Martín Carlomagno.
Primer Poemario de Tamara Melania Demiryi, editado por Tráfico de Arte - Colección Jóvenes Poetas Entrerrianos - Septiembre de 2007.
"Aún si digo sol y luna y estrellas, me refiero a cosas que me suceden.
¿Y qué deseaba yo?
Deseaba un silencio perfecto.
Por eso hablo."
Alejandra Pizarnik.
¿Y qué deseaba yo?
Deseaba un silencio perfecto.
Por eso hablo."
Alejandra Pizarnik.
Prólogo
La escritura como habitáculo, aquello que el libro abre pero no logra finalizar en una simple página. La autora deja su cuerpo; descifra sin mostrar. "Lápiz en mano pulveriza estrellas" "sobre la estatua de su indefensión" como bien dice en dos de sus poemas.
No hace falta entender, hace falta aprender la asfixia como un lenguaje cotidiano.
Escribe: "El recuerdo es lo único que permanecerá por siempre indeleble".
Quien transita este libro ingresa al borde, a ese "agujero negro" del que nos habla.
La poesía como retrato de lo que no llega, pero es la acrobacia a la que recurre para salvaguardarse de tantas noches en las que "la contemplación de la belleza puede ser agotadora". Martín Carlomagno.
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3 comentarios:
(pasé por acá y me gustó)
Buenos poemas che.
Te mando un beso.
pasé por acá de nuevo
a ver cuando nos contactamos
un abrazo
milena
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